El término de energía limpia nos lleva inmediatamente a pensar en algo positivo, y de hecho, lo es, ya que evita el efecto invernadero, muchas no producen emisiones C02 ni otros contamintantes, lo cual es benéfico para nuestro planeta.
La parte negativa es que su implentación, muchas veces requiere grandes extensiones de tierra o puede alterar a especies animales, tanto en sus hábitats terrestres como marítimo, lo cual siempre debemos tomar en cuenta, poner en la balanza lo positivo y lo negativo.